El paisaje natural está representado por aquellas áreas del entorno cuya imagen y estado de conservación vienen condicionados fundamentalmente por los fenómenos naturales. Sus características han sido definidas por la propia naturaleza, tanto mediante la acción geológica y climatológica como la de la flora y fauna.
En Tenerife, ese tipo de paisaje se asocia a las áreas protegidas donde la presencia de estos entornos es predominante y en las que se prioriza su preservación. Hay un parque nacional, otro natural y dos rurales, a los que se añaden reservas naturales integrales y especiales, monumentos naturales, paisajes protegidos y sitios de interés científico. Suman 43 espacios y, en su conjunto, ocupan aproximadamente la mitad de la superficie insular.
Espacios naturales protegidos
- Parque Nacional del Teide
- Reservas naturales integrales de Ijuana, del Pijaral, de los Roques de Anaga y de Pinoleris
- Reservas naturales especiales del Malpais de Güímar, de Montaña Roja, del Malpais de la Rasca, del Barranco del Infierno, del Chinyero y de Las Palomas.
- Parque natural de la Corona Forestal.
- Parques rurales de Anaga y de Teno.
- Monumentos naturales del Barranco de Fasnia y Guimar, de la Montaña Centinela, de Los Desrriscaderos, de las Montañas de Ifara y Los Riscos, de la Montaña Colorada, del Roque de Jama, de la Montana Amarilla, de la Montaña de Guaza, de la Caldera del Rey, del Teide, de la Montaña de Tejina, del Roque de Garachico y de la Montaña de los Frailes.
- Paisajes protegidos de la Rambla de Castro y de la Costa de Acentejo.
- Sitios de interés científico del Acantilado de la Hondura, del Tabaibal del Poris, de los Acantilados de Isora, de La Caleta, de Interian y del Barranco de Ruiz.
- Zonas Especiales de Conservación del Acantilado Costero de Los Perros, del Barranco de Icor, del Niagara, del Orchilla, del Madre del Agua, de la Cueva del Viento, de las Laderas de Chío, del Lomo de Las Eras, del Riscos de Lara, del Barranco Las Hiedras-El Cedro y de la Piña de Mar de Granadilla.